Y ganó Obama? eso qué es? Qué representa en realidad? Estuve en una fiesta donde seguimos la votación de las elecciones y, sin duda, para todos los que estábamos ahí fue algo extraordinario... y los puntos suspensivos tiene su razón por lo siguiente: Para casi todo el mundo, al menos eso es lo que transmiten acá las cadenas de radio y televisión, aún hoy jueves 6 de noviembre, junto con un buen número de "respetables" cadenas internacionales, pareciera representar un logro! Y quizás lo es... es decir, pueden aducirse tantas razones de por qué lo es o por qué no lo es. Es casi como una de las ideas trascendentales de Kant. Para los que no tienen familiaridad con ellas, en esencia plantean horizontes que nos permiten funcionar, por así decir, en el mejor de los mundos o, dicho con términos de Kant, nos permite ser prácticos, es decir, vivir. A modo de ilustración, una de sus ideas es la de la ciencia en tanto presupone un conocimiento objetivo y este, desde su epistemología, no es posible pues todo conocimiento está mediado por un sujeto y sus categorías. Es decir, no se puede conocer, por así decir, a la cosa en sí. Sin embargo, para ser prácticos propone que nos conduzcamos como si el conocimiento objetivo fuera posible, planteárnoslo como un horizonte que nos permite desarrollar "ciencia" -y hoy diríamos, sucesivas aproximaciones a lo "real" en tanto reconocemos los múltiples determinantes de nuestra experiencia pero bueno, esto es una discusión aparte. Estas ideas transcendentales vienen a colación pues se pueden aducir muchas razones por las cuales, pensar que la victoria de Obama es un logro. Pero sería un poco como estar guiándonos con una idea trascendental, sobre todo en el sentido de que nos permite sentirnos bien, pensar que las cosas ahora sí van a cambiar para bien. Esto puede ayudarnos a vivir "tranquilos" pero preferiría plantear que el que Obama haya ganado podría también interpretarse como un verdadero signo de que estamos aún peor que en el pasado, dado que tenemos esta ilusión de que esta persona representa que la política tomará un giro distinto, verdaderamente a favor del bienestar de, por ejemplo, los excluídos o más indigentes. Y digo que es "ilusión" no de modo positivo -aunque así fuera vivido por muchos en el momento de la elección- sino en el sentido de que no nos permite ver, darnos cuenta, del sistema económico en el que estamos imbuido, un sistema que nos permite creer que es normal que cada vez haya más riqueza, para unos pocos, y que sea normal que este enriquecimiento siga acompañado de toda la explotación y falta de oportunidades para la gran mayoría. El verdadero problema entonces, es que considero que esta victoria nos puede fácilmente sumergir aún más en ese pasivismo que se agudizó con la caída del Muro de Berlín, cuando caímos en la ilusión de que el tema "sistema económico" estaba resuelto pues era obvio que el comunismo no funcionaba, mientras que el capitalismo sí. No pretendo hacer un tratado de esto acá sino sólo un llamado de atención sobre un tema que, por cierto, está sumamente bien abordado, de modo crítico por un librito del filósofo Zizek, titulado Violencia. También, hay una crítica y reflexión interesante sobre el mundo que nació y acogió, desposeyéndolos de cualquier posibilidad de utopía o acción colectiva a los jóvenes y niños que crecieron justamente a partir de la caída del muro de Berlín o, como también se conoce, el famoso "fin de la historia" proclamado y acríticamente defendido por Francis Fukuyama. Algunos dicen que la razón nos caracteriza como humanos, posiblemente. Lo importante es tener presente que una razón acrítica no nos sirve para acercarnos a la "cosa en sí". Al contrario, se convierte en un velo más que nos impide una acción que verdaderamente esté basada en la "realidad", en eso que, normalmente nos gusta creer son "hechos". Termino acá pues el tema es pesado pero necesario introducirlo para ir forjando, aunque sea de a poquitos, un razonar que nos permita ver con mayor claridad el contexto en el que estamos imbuídos, en lugar de tomarlo como supuesto válido, precisamente porque no nos damos cuenta de que fundamenta nuestro modo de percibir la "realidad" y, por ello mismo, obstáculo fatídico a un accionar a favor de defender el derecho a una vida libre, plena, abierta, con corazón...