lunes, 3 de noviembre de 2008

cómo fue...es?

Y así empiezo, hoy, 3 de noviembre del 2008. Muchos años han pasado, menos he vivido -o eso siento. Primero me dediqué a ser niña, es decir, era yo, y aunque no lo sabía entonces, era yo. Sí, ya condicionada por mi entorno, mis padres y sin dudo por un buen poco de SUPER YO. Pero recuerdo esos días perteneciéndome, como hace rato no lo hago y ahora vengo a reclamarme, vengo a decir "mi parte". Nunca la pensé válida para nadie más que para mí y luego, quizás, algún "amor". El amor me ha definido... a cuántos no? Creo que ya no lo recuerdan pero, en todo caso, no puedo hablar sino de mí, es decir de lo que uno llama "yo". Es complicado esto del yo, no pretendo descifrarlo para otros pero al menos sé que se traslucirá en mucho o todo lo que diga pues es "el" punto de referencia, aunque no lo nombremos pues, como de algún modo señaló Hegel, quizás con otros términos, como sujetos no somos sino una encarnación, un momento dialéctico del objeto o existencia, lo "real". Pero bueno, no se trata de filosofar de modo denso aquí... al contrario, intentaré reflexionar tan concretamente como pueda, por así decir, pues eso tiene sus bemoles, de mi existencia práctica. Y tiene bemoles porque nuestra experiencia no es tan "simplemente" nuestra, tiene mucho prestado, de teorías, de cultura popular, y hasta "familiar" y el desafío, justamente, es desenredar un poco esa maraña. No tanto que al final el yo se vuelva nada, pues eso sería, casi, sin tantos condicionantes como los tiene. Pero lo bonito, porque es bonito, o mágico, es que nuestra capacidad de razonar permite un poco que podamos, como decía Wittgenstein, usar la escalera, para ver el panorama y luego, botarla. Lo que quizás no podemos "botar", es eso que yo voy a llamar "corazón". Es decir, el/los sentimientos, eso que generalmente pensamos opuesto a la "razón" pero que creo, sé, es lo único que da sentido, vida, realidad, es más, es, la fuente, el origen mismo, si se quiere y, al fin del día, la razón de ser de la razón... lo siento, veo que no escapé a filosofar un poco. Lo único que puedo decir como excusa es que pienso que esto que aquí quizás no tenga mucho sentido para otros, se irá aclarando en esta búsqueda de "la razón... corazón" a la que los invito, sin promesas, sin compromisos pero con el corazón.

No hay comentarios: